Vamos a ello. Un Casio Edifice que no funciona bien. Su dueño decidió que podía arreglarlo el mismo. Posiblemente un cambio de pila hubiera sido suficiente, pero esto fue lo que me encontré.
Y aquí, la tija rota. Como el cliente marco un presupuesto, básicamente nos dijo que debíamos cobrarle, ya sabíamos que no lo íbamos a reparar. Faltaba descubrir que la esfera estaba pegada, mal colocada y las patas de la misma rotas. Todo tiene solución, pero no nos ajustábamos al presupuesto marcado.
Por cierto, la pila estaba gastada, como ya he dicho posiblemente fuera el origen del mal funcionamiento del reloj, porque el movimiento lo comprobé, y funcionaba sin problemas. Una lastima.